Recuperan por completo actividades de la industria restaurantera en Querétaro

Los primeros meses de este 2024, la industria restaurantera en Querétaro, logró estabilizarse por completo, esto tras pasar el 2023 intentando recuperarse económicamente, alcanzando una derrama económica significativa y superando con actividades los obstáculos que presentó el periodo pospandemia.

Recordemos que el 2023 fue un año de recuperación económica para la industria restaurantera, a casi cuatro años del inicio de la pandemia, la cual representó un freno para el sector restaurantero.

Rosalinda Hernández Rosiles, presidenta de la delegación Querétaro de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y de Alimentos Condimentados (CANIRAC), mencionó que en 2023 cerró de la mejor manera, permitiendo así la recuperación de la industria.

“Se cumplieron las expectativas, veníamos del 2019 a la baja, en 2022 alcanzamos de 90 a 95% de recuperación y este 2023 ya alcanzamos nuestro 100%, entonces el gremio restaurantero va despegando poco a poco y terminamos bien 2023”, explicó.

Este sector logró finalizar el año con una derrama económica de al menos 250 millones de pesos, esto por la demanda de servicios y por las actividades decembrinas.

“Venimos de un 2023 muy bueno, cerrando diciembre con una derrama económica muy buena, de 250 millones de pesos para todo diciembre. En este enero venimos de una quincena buena, teniendo una baja en la segunda quincena de enero, pero ya repuntando para el gremio en este 14 de febrero”, expresó.

Estiman que para el 14 de febrero, se obtenga una derrama de 50 millones de pesos (mdp) y un aumento del 45 y 50 por ciento en sus ventas, mientras que los socios de la cámara se alistan con paquetes para comidas y cenas, los cuales pueden ir desde los 350 hasta mil 200 pesos por persona.

¿Qué actividades apoyaron el crecimiento?

Con este inicio de año, se ha hecho presente el impacto de la inflación en los alimentos, tanto que el sector restaurantero lo ha resentido, por esta razón, Hernández Rosiles, mencionó que se ha tratado de sortear estas alzas para no afectar tanto a los precios finales de los platillos y este no afecte a los comensales.

“Sí se resiente, pero nosotros por lo regular nuestras cartas sí las costeamos de una manera que no perjudique también a nuestros comensales, sí tratamos de costear sobre todo teniendo en cuenta esta altas y bajas en los precios, tanto en verdura como en proteína”, señaló.

Al menos en la primera quincena del año, la inflación anual fue de 4.60 por ciento en el estado, pero en los alimentos fue de 6.70 por ciento, 2.10 puntos porcentuales por encima de la inflación general, así reportó el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC), del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).

Mientras que en el grupo de las frutas y hortalizas registraron un aumento pronunciado de 15.84 por ciento en el INPC; productos como la leche, derivados de leche y el huevo reflejaron un alza de 6.88 por ciento; mientras que el azúcar, el café y los refrescos envasados aumentaron 6.16 por ciento.

La inflación anual también afectó al pan, las tortillas y los cereales, registrando un aumento de 5.75 por ciento en la primera mitad de enero, mientras que aceites y grasas comestible tuvieron una disminución de -5.27 por ciento, los pescados y mariscos -1.81 por ciento y las carnes -0.50 por ciento.